Un día de estos tuve que ir a una cita médica donde el acceso es por medio de dos ascensores uno frente al otro. Llegué muy apresurada porque iba justo a tiempo y no podía perder ni un segundo. Llegué frente a los ascensores y me puse a esperar impacientemente. Había un grupo grande de personas mirando hacia un ascensor y curiosamente me di cuenta que yo era la única viendo hacia el otro ascensor: literalmente dándole la espalda al grupo que estaba esperando subir. Curiosamente mi ascensor llegó primero y todo el grupo que estaba viendo hacia el otro se apresuró a seguirme y todos subimos. Y pensé que a veces nos conviene ver para otro lado aunque nadie lo haga.
Este evento me recordó al Reino de Dios. Para lograr entender como vivirlo es mejor ver para el otro lado donde la gente acostumbra enfocar su mirada.La masa tiende a ir toda junta aunque no entienda realmente para donde se dirige y para ser discípulo de Jesús generalmente hay que hacer todo lo contrario de lo que la gente epstá acostumbrada a hacer.Como por ejemplo: perdonar y amar siempre, poner la otra mejilla, permanecer en silencio en situaciones donde el mundo grita; tener fé en la humanidad cuando todo el mundo desc uno del otro.Ver en la otra persona un rasgo de Jesús, ser tolerante, conciliador pero a la vez no pecar de omisión y hablar con valentía en contra de la injusticia. ¿Será posible que estas sean las características de la iglesia? que la gente nos vea y digan:" de fijo tienen que ser cristianos, son únicos . Sólo ellos podrían reaccionar asi"...
Creo que la Iglesia está cambiando para bien. Creo profundamente en las nuevas generaciones que siguen a Dios: Nos están dando muestras que el Espíritu sigue incomodando a la gente y la pone a ser testigos del amor de Dios: tienen un celo desmedido (que en mi época no se daba)por vivir Mateo 25: cuidar al necesitado a la viuda, al huerfano, al privado de libertad.¿ No será que esta es la forma de mostrarle al mundo que Dios es real?
No temamos de ver hacia el otro lado. La gente se dará cuenta algún dia que llegarán primero si se atreven a hacerlo. De todas formas es aburrido hacer lo que todo el mundo hace.Si decimos que somos sus discípulos, estudiemos su vida y nos daremos cuenta que siempre vió para el lado contrario.
La próxima vez que se suba en un ascensor fíjese si hay uno que la gente no ha visto, que ese puede ser el que mas le convenga, aunque se vaya solo las primeras veces. De fijo unos cuántos se animarán a seguirlo.